Este delicioso pastelito se ha convertido en el acompañante ideal para las fiestas infantiles, cumpleaños, un detalle para obsequiar en una ocasión especial y por supuesto para darse un dulce gustito a la hora del postre.
¿Pero qué tienen de especial estos pastelitos?
Primero su presentación: para una persona! Lo que lo hace muy práctico para los pequeños. Su preparación suele ser fácil y rápida, se hacen en moldes similares a los empleados para hacer magdalenas o muffins. Y el toque final: añadidos como glaseado y virutas.
¿Qué tan fácil de preparar es?
La receta de un cupcake es similar a la de cualquier otra torta: mantequilla, azúcar, huevos y harina. Su ventaja: debido a su pequeño tamaño se hacen más rápido que una torta común. Puedes usar moldes similares a los usados para hacer muffins y para la decoración: una crema de mantequilla a la que le puedes añadir sabor y color para hacerlo aún más vistoso y apetecible, manjar, chocolate …todo depende de tu imaginación.
Datos curiosos.
Estos pastelitos son originarios de Estados Unidos y en siglos anteriores, antes de que los moldes para muffins y cupcakes estuvieran ampliamente disponibles, se cocinaban en recipientes de barro individuales o en copas. Por eso, el uso del nombre se mantiene en inglés. El nombre de "Fairy cake" (torta de hadas) es una descripción fantasiosa de su tamaño, ya que según los pasteleros sería apropiado para una fiesta de hadas.
Preparado para hacer tus propias tortas de hadas?