Trucos Caseros

Lo esencial de una parrillada vegetariana

No hace falta carne para preparar una parrillada, por eso acá te mostramos cómo hacer una vegetariana y deliciosa.

Choclos y espárragos sobre una mesa de madera en una parrillada vegetariana

Entre opciones rellenas, hamburguesas con granos y todos los colores de los vegetales, queda claro que no hace falta carne para una gran parrillada

¿Quién dijo que una parrillada debe tener carne? ¿Por qué las verduras deben ser un acompañamiento en estas ocasiones? En esta parrillada vegetariana cambiamos las reglas para darle protagonismo a los vegetales, que nos entregan un mundo de colores y sabores para sorprender a familiares y amigos en la próxima reunión alrededor de las brasas. 

Consejos antes de preparar la comida 

Sin embargo, así la idea sea cocinar carne o verduras, hay algunas recomendaciones que vale la pena tener en cuenta antes de llevar la comida a la parrilla.  

Nunca olvides limpiar la parrilla 

Lo mejor es hacerlo después de una parrillada, para aprovechar que el calor hace que se ablanden los restos de grasa o alimentos que quedan pegados en la rejilla. 

Si tienes una parrilla de gas, puedes precalentarla por unos minutos, pero si es de leña o carbón, definitivamente es mejor limpiarla después de cocinar. En cuanto a las rejillas, no importa el tipo de parrilla, el proceso y las opciones son las mismas.  

Lo que mejor funciona es usar un cepillo de alambre remojado en agua y jabón. También puedes utilizar una cebolla sin cortar o hacer una bola con papel aluminio, y restregar cualquiera de las dos sobre las rejillas calientes. 

Otra opción es retirarlas y dejarlas en agua caliente con jabón, pero más allá del método que elijas, recuerda que una vez estén secas, debes untarlas con un poco de aceite. Puedes utilizar un pañuelo para que quede bien. Esto ayudará, en un futuro, a que la comida no se pegue. 

Si tienes tiempo: una limpieza profunda 

Si tu parrilla es de carbón o leña, una vez limpies la rejilla, ya puedes retirar todas las sobras de las brasas. Después limpia las cenizas que quedaron y, si quieres una limpieza profunda, utiliza el cepillo de alambre con agua caliente y jabón para dejar el contenedor reluciente. 

Si tienes una parrilla a gas, el proceso de una limpieza profunda es un poco más largo. Esto es importantísimo: ¡no olvides cerrar el gas! Tras dejar las rejillas brillantes, limpia las placas de metal con agua y jabón. Después, usa un palillo para destapar los huecos de los quemadores para asegurar que el gas fluya. Luego, con una esponja, lava los tubos y el fondo de la parrillada. 

Los utensilios que vas a necesitar 

Además de tener una parrilla limpia, que asegurará que la comida no tenga un sabor a quemado o extraño por las sobras de las parrilladas anteriores, también debes revisar que tengas los utensilios apropiados. Unos guantes para no quemarte, una varilla para mover las brasas y unas pinzas para voltear la comida son lo básico. 

Teniendo en cuenta que acá hablamos de una parrillada vegetariano, siempre ten cerca un cuchillo, un tenedor y un plato, porque tendrás que cortar y preparar varios ingredientes. Por último, si la parrilla es de carbón o leña, debes tener suficiente para que no te quedes sin brasas, uno de los peores errores entre los principiantes. Es mejor que sobre y no que falte. 

Las ideas que te mostraremos funcionan mejor con una parrilla de carbón que te permita tener tanto preparaciones sobre las rejillas, como un espacio al lado de las brasas para cocinar algunas verduras envueltas en aluminio. Ahora, no significa que esta sea la única opción para cocinar una parrillada vegetariana. Los platos con aluminio también se pueden hacer sobre las rejillas. 

A rellenar con libertad 

Acá empezamos a derrumbar la idea de que una parrillada debe tener carne. La cantidad de opciones que te da la tierra para mezclar sabores y colores, es un deleite para el paladar y para la vista. Y acá hay alternativas para todo tipo de vegetariano: el que no consume lácteos, aquel que no come huevo, hasta algo totalmente vegano. 

Portobellos rellenos 

En primer lugar, están los portobellos rellenos. Debes tener cuidado de no romperlos cuando estés limpiándolos. El tallo es totalmente opcional, si te gusta, déjalo, pero también lo puedes quitar. Corta cebolla, ajo, perejil, tomate y zanahoria. Mezcla todo con maíz y arvejas. Luego llena los portobellos. Encima puedes ponerle el queso de tu preferencia, que te ayudará como reloj. Ponlos en la parrilla y cuando el queso se derrita, estarán listos. 

Tomates gratinados 

Los tomates gratinados también brillan en la parrilla. Córtalos por la mitad y saca todas las semillas, hasta que queden limpios por dentro. Tras echarles un poco de aceite, déjalos asar unos minutos, con la parte cortada mirando hacia abajo. Mientras tanto, en un tazón mezcla queso parmesano, romero, albahaca y un poco de aceita de oliva. Voltea el tomate, llénalo con la mezcla y envuélvelo en papel aluminio. De nuevo, el queso es tu reloj.

Pimiento amarillo siendo cortado para rellenar en una parrillada vegetariana

El brillo de los pimientos 

Aumentamos el tamaño de nuestras verduras y seguimos rellenando comida, esta vez un pimiento con huevo. Piensa que se cocinará dentro del vegetal, así que elige bien el tamaño de los ingredientes. También ten en cuenta esto cuando cortes la verdura, deja el tallo y fíjate que tenga suficiente espacio para que el huevo no se salga. 

Una vez cortes el pimiento, ponlo a cocinar un rato. Rompe un huevo adentro y de nuevo a la parrilla. Acá no hay ninguna diferencia con un huevo preparado en una sartén, solo tienes que esperar hasta que quede bien, que la clara esté totalmente blanca. Puedes añadirle cebolla y sal. 

Para llenar el apetito 

Y si los invitados realmente tienen hambre, los zucchinis rellenos son los indicados para acabar con el apetito en una parrillada vegetariana. Los puedes cortar por la mitad. Les sacas todo el relleno con una cuchara y ahí tienes es espacio para aprovechar, así que deja volar tu imaginación. 

Te recomendamos un relleno con maíz, champiñones, papas, berenjena y cebolla. Corta todos estos ingredientes y mézclalos con aceite de oliva y pimienta. Añádele albahaca y, si quieres, algo de queso. Luego, envuélvelos en papel aluminio. Déjalos directamente encima de las brasas, no sobre la rejilla (aunque también funciona, pero se demora más), y en 10 minutos tendrás una maravilla vegetariana. 

No olvidamos las papas 

La última idea para rellenar es uno de los clásicos: las papas. Déjalas hervir con cáscara hasta que puedas clavarles un cuchillo con facilidad. Por un lado, corta solo un pedazo para crear una base (no vas a querer que se den vuelta y se rieguen después), y por el otro, hazle un corte más grande. Por este último sácale el relleno con cuidado, que no se rompa. 

Acá hay dos opciones. Mezclar esa papa que sacaste con cualquiera de las verduras que hemos mencionado arriba, más algo de queso, o llenarlas únicamente con vegetales. Ya es decisión de cada uno. En ambos casos puedes darle más sabor con sal, aceite de oliva y pimienta. 

Recetas con vegetales

Opciones para una gran hamburguesa vegetariana 

Si existe un clásico en la comida sin carne, definitivamente es la hamburguesa vegetariana. Hay un montón de opciones para cocinar, pero acá nos vamos a enfocar en dos especialidades para la parrilla. 

Con frijoles negros 

La primera es preparada a partir de frijoles negros, pero también necesitarás cebollas, arroz integral (cocinado), sal, paprika, migas de pan y perejil. Mezcla todos los ingredientes en una licuadora, dales la forma de la hamburguesa y a la parrilla. Si la textura está muy suave y no te deja manipularla, añádele más migajas para que se seque y quede más compacta. 

A partir de garbanzos 

La otra mezcla es de garbanzos y te recomendamos hacerla antes de tu parrillada, porque es un poco más larga y requiere más trabajo. Licúa los garbanzos con un par de huevos, pero no hasta que quede líquido. En un sartén cocina cebollas, ajos y pimientos cortados, con un poco de aceite de oliva. Después une tus verduras con la mezcla en un bowl aparte y agrégale migajas de pan, que se encargan de absorber los líquidos. Dales forma y directo a la parrilla. 

Mientras cocinas tus hamburguesas, pon a dorar el pan un rato sobre las rejillas. Gira las hamburguesas cuando sea necesario y acompáñala con cebolla, tomate, lechuga y guacamole. 

Choclos y brochetas en una parrillada vegetariana

 

Las verduras perfectas para una parrillada vegetariana 

La parrilla le da un toque único a la comida, sobre todo cuando es de carbón o leña le deja un sabor y un aroma distinto. Arriba ya te recomendamos varias opciones para vegetales rellenos, pero aquí hay algunas ideas para seguir explorando directamente sobre las rejillas. 

Brochetas para todos los gustos 

Corta zucchini, pimiento, cebolla y tomate en cuadros o rodajas. Ponlos todos en un bowl y échales sal, ajo y aceite de oliva. Mezcla todo y déjalos marinando un rato. Luego haz una brocheta y ponla a asar. Si estás usando palitos de madera, mójalos un poco para que no se vayan a quemar; los de metal no tienen problema. 

Incluso puedes añadirle pedazos de piña. Córtala en rodajas y le dejas asando, así de fácil. En pocos minutos estará en su punto. Vuelve a cortar las rodajas en partes más pequeñas e inclúyelas en el pincho. 

Lo bueno de estas brochetas es que puedes explorar todos tus vegetales favoritos y utilizar los que más te gusten o jugar con distintas combinaciones. Y si no tienes ningún palito u olvidaste comprarlos, el buen amigo del papel aluminio aparece para ayudarte. Es tan sencillo como envolverlos en papel aluminio y dejarlos en las brasas o en las rejillas por unos siete minutos. 

Verduras a la parrilla 

Si simplemente quieres unos vegetales asados sin mayor complicación, lo más rápido y sencillo es comprar espárragos y choclos. A los primeros rocíalos con un poco de aceite, a los segundos úntalos con mantequilla. Ponlos encima de las rejillas y gíralos unas cuantas veces después de dos minutos. Fácil y exquisito. 

¡Ya no tienes ninguna excusa! Ahora conoces muchísimas opciones para una parrillada vegetariana memorable, con variaciones en el uso de queso y huevo, para que tus amigos y familiares que no comen carne puedan disfrutar también de la parrilla.